Si bien, algunos indicadores laborales han mejorado en el último año en Ecuador, es importante reflexionar en torno a otros aspectos de orden cualitativo como la informalidad en el empleo, la calidad e inclusión laboral, la brecha salarial y equidad de género, entre otros para tener una visión más completa de la situación real del trabajo en el país. “Las cifras solas de por si no son suficientes para afirmar que el empleo ha mejorado significativamente y de acuerdo al análisis que realizamos como Adecco, vemos que existen importantes desafíos a afrontar. Por ejemplo, aún persisten brechas relevantes en cuanto a la remuneración de los trabajadores y a la calidad del empleo, lo que puede limitar la capacidad de algunas personas para acceder a trabajos bien remunerados y con buenas condiciones laborales”, explica Sebastián Lima, director Nacional de Calidad y Servicio de Adecco Ecuador.
A continuación, Adecco comparte un análisis sobre los principales desafíos laborales en Ecuador y recomendaciones para enfrentarlos tanto a nivel de empresas como de trabajadores.
Desempleo:
- La disminución de la tasa de desempleo es una buena noticia para febrero de 2023. Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), se ubicó en 3,9%, lo que representa una reducción del 0,5% con respecto al mismo período del año anterior. Si bien existe una caída, es importante señalar que este indicador puede ser influenciado por varios factores, como la desaceleración económica, la informalidad laboral y la baja calidad del empleo.
- De igual manera, en el cuarto trimestre de 2022, la tasa de desempleo se ubicó en el 3,8%, lo que representó una disminución del 0,9% en comparación con el mismo período del año anterior, cuando se ubicó en el 4,7%.
Subempleo e informalidad:
- Entendiendo que el subempleo es considerado como un trabajo precario donde una persona gana menos del salario mínimo (USD 450 al mes) o trabaja menos de la jornada laboral legal, se observa que los índices históricos del subempleo en Ecuador reflejan una tendencia hacia el subempleo persistente; además de ello, se concentra principalmente en los sectores más vulnerables de la población como los jóvenes, las mujeres, las personas con bajos niveles educativos y las comunidades rurales.
- Por otro lado, la pandemia de COVID-19 ha exacerbado esta situación, lo que evidencia la necesidad de implementar políticas y programas que fomenten la creación de empleos dignos y reduzcan las barreras que impiden a los trabajadores acceder a oportunidades de trabajo de calidad.
- De acuerdo al INEC, la tasa de subempleo en Ecuador se ha mantenido en niveles altos en las últimas décadas. En el año 2011, la tasa fue del 44,2%, mientras que en el último trimestre de 2022 se ubicó en un 20,8%.
- Es importante destacar que, “aunque la tasa de subempleo ha disminuido, la tasa de informalidad laboral en el país ha aumentado durante el cuarto trimestre de 2022. En concreto, el 51,8% de la población económicamente activa se encuentra en este segmento, lo que representa un aumento del 1,6% con respecto al mismo período del año anterior. Este es un dato importante a considerar debido a que la informalidad laboral se asocia a menudo con la precariedad del empleo, la falta de protección social y una remuneración más baja en comparación con el trabajo formal”, señala el experto de Adecco.
- Este incremento de la informalidad laboral puede deberse a varios factores, como la falta de empleo formal, la falta de regulación del mercado laboral y las condiciones de trabajo deficientes en los sectores formales.
- Para abordar este desafío, en Adecco consideramos que es necesario implementar políticas que promuevan la formalización laboral y mejoren las condiciones de trabajo en el sector informal. Esto incluye brindar apoyo a pequeñas y medianas empresas para formalizar sus operaciones y ofrecer incentivos fiscales para promover la contratación formal.
Brecha salarial e inequidad de género:
- La brecha de género en el mercado laboral ecuatoriano sigue siendo significativa, ya que la tasa de participación laboral de las mujeres es mucho menor que la de los hombres. Según los datos del INEC, en el cuarto trimestre de 2022, solo el 41,6% de las mujeres en edad de trabajar participó en el mercado laboral, mientras que el 58,4% de los hombres lo hizo.
- Si bien, esta participación es mejor que en los últimos años, aún hay un largo camino por recorrer para lograr una equidad de género en este aspecto. Además, es necesario abordar las barreras estructurales que impiden que las mujeres participen plenamente en el mercado laboral, como la discriminación de género, la falta de oportunidades de capacitación y la falta de acceso a servicios de cuidado infantil asequibles y de calidad.
- Además, en promedio, las mujeres ecuatorianas ganan alrededor de un 20% menos que sus colegas masculinos en el mismo puesto de trabajo, de acuerdo con estimaciones de Adecco Ecuador.
- En consecuencia, la brecha de género en el mercado laboral no solo es una limitante para la igualdad de oportunidades y derechos de las mujeres, sino también para promover el potencial económico del país, ya que existen menos mujeres insertas en el mercado laboral y en la economía en general.
¿Qué pueden hacer las empresas?
- Promover la formalización del empleo: Muchas empresas en Ecuador todavía operan en el sector informal, lo que implica que sus trabajadores no cuenten con los mismos derechos y protecciones laborales que los empleados formales. Al formalizar el empleo, las empresas pueden ayudar a mejorar las condiciones laborales de sus trabajadores y contribuir a la estabilidad del mercado laboral.
- Invertir en capacitación y desarrollo de habilidades: Varias organizaciones enfrentan dificultades para encontrar trabajadores con las habilidades y competencias necesarias para desempeñar determinados roles. Al invertir en programas de capacitación y desarrollo de habilidades, las empresas pueden contribuir a reducir la brecha de habilidades y facilitar el acceso de los trabajadores a trabajos de mayor calidad.
- Promover la igualdad de género: En Ecuador, las mujeres aún enfrentan desigualdades en el mercado laboral, incluyendo brechas salariales y dificultades para acceder a empleos de calidad. Las empresas pueden ayudar a reducir estas brechas al adoptar políticas y prácticas que promuevan la igualdad de género en el lugar de trabajo.
- Fomentar la innovación y el emprendimiento: Las empresas que fomentan la innovación y el emprendimiento pueden contribuir a la creación de nuevos empleos y al crecimiento económico. Al apoyar el desarrollo de nuevas empresas y tecnologías, las empresas existentes pueden contribuir a la diversificación de la economía y a la creación de empleos más especializados y de mayor valor.
- Colaborar con el gobierno y otras organizaciones: Finalmente, es importante que las empresas colaboren con el gobierno y otras organizaciones para desarrollar políticas y programas que fomenten el empleo y la inversión en el país. Al trabajar juntos, los diferentes actores del mercado laboral pueden contribuir a la creación de un ambiente propicio para el crecimiento económico y la creación de empleos de calidad.
¿Qué pueden hacer los trabajadores?
- Capacitarse y actualizar sus conocimientos en las habilidades y conocimientos necesarios para desempeñarse en los empleos más demandados en el mercado laboral. La formación técnica y la educación superior pueden ser clave para mejorar las oportunidades de empleo y la estabilidad laboral.
- Adaptarse a las necesidades y requerimientos de las empresas, así como estar dispuestos a trabajar en equipo para lograr los objetivos de la organización. La flexibilidad y la capacidad de aprendizaje continuo son habilidades altamente valoradas por los empleadores.
- Estar atentos a las oportunidades de empleo y estar dispuestos a considerar opciones de trabajo fuera de su zona de confort geográfica o profesional. El mercado laboral puede ser muy dinámico y la capacidad de adaptarse a los cambios y a las nuevas oportunidades puede ser clave para conseguir un trabajo estable.
- Mantener una actitud positiva y proactiva en la búsqueda de empleo, y aprovechar todas las herramientas disponibles para conectarse con empleadores y oportunidades laborales, como las redes sociales profesionales, las ferias de empleo, las agencias de colocación y las páginas web de búsqueda de empleo.