Tras superar una pandemia a causa del Covid-19, la salud pública enfrenta grandes desafíos. Uno de ellos se refiere a las múltiples enfermedades respiratorias que afectan a la población mundial, pues, aunque han pasado desapercibidas, los casos de gripe, bronquiolitis, neumonía y otras afecciones se han incrementado. Además, la Organización Panamericana de la Salud (OPS)[1] advierte que el cambio climático contribuye al aumento de estas patologías y se espera que esta tendencia continúe en el próximo año. En Ecuador, hasta abril del presente año se notificó 45.486 casos de neumonía, siendo Pichincha la provincia de mayor prevalencia con 17.203 casos[2].
Ante este escenario y debido a que la OMS[3] insta a la población mundial a estar preparada para posibles futuras pandemias, Dra. Erika Hernández, Medico Ocupacional de FEMSA Salud – GPF enfatiza la importancia de incorporar prácticas de cuidado personal basadas en cuatro pilares fundamentales: conocimiento en temas de salud, cuidado del bienestar físico y mental, alimentación saludable y buena higiene.
El concepto de autocuidado, promovido por la OMS[4], se refiere a la capacidad de las personas, familias y comunidades para promover y mantener la salud, prevenir las enfermedades y hacerles frente con o sin el apoyo de un profesional de la salud. Desde 1983 se celebra el «Día Internacional del Autocuidado» cada 24 de julio, fecha que resalta la importancia de cuidar nuestra salud las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
En este sentido, la Dra. Erika Hernández de FEMSA Salud – GPF ofrece una serie de consejos para prevenir enfermedades y mantener una vida saludable:
- Hidratación: Tomar agua regularmente ayuda a mantener hidratadas las membranas mucosas y reduce la vulnerabilidad a virus que causan resfriados y gripes.
- Dieta saludable: Una alimentación equilibrada y rica en verduras, frutas, cereales integrales y baja en azúcares y alimentos procesados; fortalece el sistema inmunológico y previene enfermedades como obesidad, hipertensión, diabetes y enfermedades cardíacas.
- Actividad física: Realizar al menos 45 a 60 minutos de ejercicio diario mejora la calidad de vida y previene enfermedades como diabetes, colesterol elevado, obesidad, osteoporosis e hipertensión.
- Descanso y reducción del estrés: Dormir adecuadamente y reducir el estrés son fundamentales para reponer energías, mejorar el estado de ánimo y fortalecer el sistema inmunológico.
- Vacunación y seguimiento médico: Mantener al día las vacunas, especialmente en el caso de los niños, y realizar visitas regulares al médico para monitorear el crecimiento y desarrollo.
Hernández destaca que, aunque no podemos cambiar nuestros genes, podemos prevenir muchas enfermedades mediante un estilo de vida saludable. Además, resalta que el consumo de vitaminas, minerales, suplementos alimenticios, probióticos y más, son complementarios para implementar una rutina de autocuidado de acuerdo con las necesidades de cada persona.
Como parte de su compromiso con la salud y el bienestar de la población, FEMSA Salud – GPF cuenta con la categoría «Bienestar», que promueve el autocuidado y una vida saludable a través de un amplio portafolio de productos fabricados en Estados Unidos bajo estrictas normas de calidad y con componentes naturales.