Algunas profesiones representan un riesgo importante para la audición de los trabajadores. Esto debido a la prolongada exposición a ruidos que superan los decibeles (Db) permitidos para el oído humano. De acuerdo con la Organización Mundial del Trabajo (OIT), [1]la existencia de un nivel de ruido seguro depende esencialmente de dos cosas: 1) el volumen y 2) el tiempo al que se está expuesto. Este nivel, según las normas en la mayoría de los países es de 85-90 Db, durante una jornada laboral de ocho horas. Sin embargo, según el National Institute of Health, [2]un ruido entre 70 y 90 Db puede causar un daño lento pero creciente, o un solo ruido fuerte, como un disparo de 150 Db, puede causar daño auditivo permanente.
En este contexto y con ocasión del mes del trabajo, GAES comparte una lista de las profesiones más expuestas al ruido. “Nuestro objetivo principal es generar conciencia sobre la importancia de cuidar la audición de los trabajadores, ya que la disminución auditiva no es la única consecuencia de esta exposición. Las personas inclusive pueden contraer tinnitus, cuyos principales síntomas son: pitidos, silbidos, zumbidos o murmullos en los oídos, y hasta presentar trastornos en el sueño”, explica Jennifer Rivas, terapista del lenguaje de GAES Ecuador.
Antes de conocer cuáles son estas profesiones, es importante comprender que el ruido se mide por decibeles. En esta gráfica de GAES se puede ver cuáles son los niveles o umbrales adecuados y los habituales en circunstancias cotidianas.
Sobre las profesiones más expuestas al ruido:
- Personal de control en tierra del aeropuerto: Este tipo de trabajo lidera la lista, ya que los ruidos de los aviones que aterrizan y despegan pueden alcanzar los 140 Db.
- Odontólogo: Diferentes estudios revelan que gran cantidad de los aparatos y de los instrumentos utilizados en la práctica cotidiana de la odontología producen ruidos que sobrepasan los 80 dB y que, inclusive, algunas turbinas pueden emitir sonidos de hasta 110 dB.[3]
- Minero: Los Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades [4]explican que un estudio realizado en Estados Unidos encontró que el 40% del personal que trabajaba en las minas de carbón estaba expuesto a ruidos superiores a 90 Db de forma regular. Los niveles de ruido pueden llegar hasta 135 Db.
- Constructor: El uso de las diferentes herramientas que se requieren en esta profesión generan niveles altos de ruido. Por ejemplo, el sonido de un taladro llega a los 119 Db, el martillo de perforación a los 114 Db, la motosierra a los 110 Db, el rociador de pintura a los 105 Db.[5]
- Carpintero: También se requiere el uso de herramientas que producen sonidos estruendosos. La pistola de clavos provoca entre 110 y 140 Db.
- DJ o estrella de rock: La música a todo volumen puede producir entre 110 y 140 Db de ruido, por lo que también es una profesión con una elevada exposición. De igual manera, el sonido de la sirena de ambulancia llega a estos límites.
- Maderero: La motosierra genera de 110 a 140 Db de ruido.
- Repartidor de moto: El ruido de la moto más el viento pueden producir un sonido ensordecedor de 103 Db, según Hearing Test Labs.
- Peluquero: Aunque parece inofensivo, el ruido producido por varios secadores de pelo a la vez puede alcanzar los 85 Db.
Recomendaciones:
*El Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional (NIOSH) recomienda algunas prácticas para prevenir la disminución auditiva relacionada con el trabajo:
- Entender la exposición al ruido que existe en el ambiente laboral, a fin de establecer medidas de mitigación y protección para los trabajadores.
- Eliminar o reducir el ruido: En la medida de lo posible.
- Implementar controles de ingeniería: Para determinar la protección auditiva necesaria.
- Proporcionar protección auditiva.
“Lo más importante para prevenir la disminución auditiva relacionada con el trabajo es contar con la protección adecuada. En todas las profesiones más expuestas al ruido es posible implementar medidas para proteger a los trabajadores, empezando por el uso de protectores auditivos, cascos, entre otros que pueden mitigar los sonidos”, concluye la especialista de GAES